Ponerle nombre y apellidos a la invención del robot de cocina es complicado. Más que nada, porque todo depende de lo que queramos considerar como robot de cocina. En todo caso, es más sencillo hablar de marcas y compañías, que de inventores como tal. Así es que vamos por partes.
Si entendemos por robot de cocina un procesador de alimentos capaz de simplificar y minimizar el tiempo invertido en cortar, picar, triturar o moler cualquier cosa que vayamos a utilizar mientras cocinamos, se nos ocurre que los primeros molinos de piedra que se empezaron a usar en el Neolítico, compuestos por un canto rodado y una base cóncava, ambos de granito, serían buenos candidatos al título de primer robot de cocina de la historia.
Pero eso sería ponerse demasiado estrictos. Rebajando el nivel de rigurosidad hasta el punto de acercanos a la idea de robot de cocina que la mayoría tenemos en mente, tendríamos que retrotraernos hasta comienzos del siglo XX, concretamente hasta 1919, año de la fundación de la marca Kitchenaid como división comercial de la Hobart Manufacturing Company americana
En ese momento, después de algunos años de desarrollo, tiene lugar el lanzamiento de la primera batidora de pie eléctrica en Estados Unidos, en un primer momento para uso industrial. Pero es a partir de entonces, cuando el primer robot de cocina procesador modelo H-5, da lugar a la aparición de toda una lista de robots de cocina domésticos propulsados por motores eléctricos, en una época en la que la electricidad empieza a ser una realidad en la mayoría de hogares de los países desarrollados.
Para otros, el llamado Robot-Coupe desarrollado en Francia allá por 1969, que combinaba las funciones de procesado (corte, batido, etc.) con las de cocinado por inducción, fue el primer robot de cocina para uso industrial, y de éste nació en aún hoy famoso Magimix en 1972, el primer robot de cocina para uso doméstico francés, y toda una institución en Francia y Europa entera.
Es curioso, por tanto, que los primeros coletazos tuvieran lugar en Estados Unidos, para desarrollarse años después un primer robot de cocina que cocinaba y procesaba en Europa que, un año más tarde, era comercializado de nuevo en norteamérica con el nombre de Cuisinart, causando toda una revolución en el mercado.
El siguiente gran mazazo en el mercado de robots de cocina lo dio Thermomix, también considerado por muchos como el primer robot de cocina doméstico. De fabricación alemana, éstos se encuentran en el mercado desde 1961, aunque hasta 1980 no tiene lugar el lanzamiento del Thermomix TM 3000 para procesar y cocinar, el primero de una larga saga que aún reina en la actualidad en el mercado de robots de cocina.
No obstante, también son mucho los que se han sentido siempre decepcionados al relacionar los modelos de primeros de robots de cocina del mercado, con lo que en su mente se dibujaba, irremediablemente, con la idea de robot: un cocinero autómata capaz de hacerlo todo por sí solo.
En este sentido, el mundo de la innovación tecnológica tiene aún mucho camino que recorrer hasta introducirse en los hogares de forma generalizada, pero existen grandes avances, como el famoso Moley, un ambicioso robot de cocina con inteligencia artificial que, si bien no es capaz de crear sus propias recetas, sí es capaz de reproducir lo que ve.