Las freidoras sin aceite llegaron pisando fuerte al mercado, prometiendo comidas más sanas y con menos grasas, gracias a la ausencia casi total de aceite en su elaboración. Pero ¿son realmente tan revolucionarias? Porque su funcionamiento, basado en insuflar chorros de aire caliente sobre los alimentos, es algo que ya hacen los hornos de toda la vida… Por eso, muchos usuarios, cuando nos disponemos a comprar algunos de los electrodomésticos y accesorios ideales para nuestras cocinas, nos encontramos con ese eterno debate: «freidora sin aceite vs horno de convección, ¿cuál es mejor?«.
Para poder dar con una respuesta definitiva, nos hemos puesto a investigar sobre estos dos aparatos, en busca de posibles diferencias que hagan que la balanza se decante en favor de uno u otro. Para empezar, hemos de decir que ambos electrodomésticos se basan en los mismos principios para conseguir cocinar los alimentos: utilizan un mecanismo de circulación de aire caliente. Sin embargo, eso es solo la punta del iceberg… Si nos fijamos bien, veremos que ambos electrodomésticos se diferencian en muchos aspectos, que todos deberíamos tener en cuenta a la hora de decidir qué comprar, un mini horno o una freidora sin aceite.
Básicamente, las diferencias entre un horno y una freidora sin aceite que debes tener claras, atañen a los siguientes aspectos:
- Tamaño. En cuanto al tamaño, es evidente que las freidoras sin aceite destacan por ser bastante comedidas, aunque existen muchas medidas. Es cierto que, en un intento de asemejarse a las freidoras convencionales, en un principio los fabricantes sacaron al mercado freidoras de aire caliente bastante pequeñas. Hoy sabemos que el estándar mínimo se sitúa entre los 3,5 y los 5 litros. No obstante, un horno normal puede estar en torno a los 25 litros, así que en este aspecto, las diferencias son claras.
- Portabilidad. Aunque existen freidoras sin aceite de hasta 15 litros, todas ellas son portátiles, siendo las más grandes algo similar a los hornos de sobremesa, pero con una tecnología renovada. De hecho, puede que tenga más sentido buscas las diferencias entre freidoras sin aceite y hornos de sobremesa, que entre las primeras y los hornos convencionales. Éstos, como ya sabes, van encastrados y requieren, por tanto, de un espacio fijo en la cocina que, además, es bastante considerable.
- Circulación de aire. Aunque todos los hornos cuentan, al menos, con una función de circulación de aire, en el caso de las freidoras sin aceite, esta característica va mucho más allá, convirtiéndose en el verdadero fenómeno que permite cocinar rápido, con una pequeña cantidad de aceite (para impregnar los alimentos, simplemente). Al contar, además, con habitáculos pequeños, esa tecnología se hace mucho más eficiente.
- Tiempo de cocción. Basándonos en lo anterior, podemos decir que el tiempo de cocción en las freidoras sin aceite es menor que el de los hornos convencionales, lo cual es de agradecer tanto por cuestiones de consumo eléctrico, como por lo que sigue.
- Calor emitido. Al ser más pequeñas, eficientes, y tardar menos en cocinar, las freidoras sin aceite emiten menos calor que los hornos, y resultan, por tanto, mucho más idóneas para usarlas en verano.
- Precio. En general, como ya sabes, los precios de las freidoras sin aceite son muy inferiores a los precios de los hornos, aunque también hay que tener en cuenta que la durabilidad media de los aparatos portátiles, es siempre menor.
Cuestiones como el tamaño, el tiempo requerido para la cocción de los alimentos, el diseño, la versatilidad o la facilidad de limpieza son cuestiones en las que las freidoras sin aceite y los hornos son diferentes. Es algo que podemos ver, con más profundidad, en las siguientes secciones de este artículo, en las que detallaremos los principales PROS y CONTRAS de las freidoras sin aceite con respecto a los hornos tradicionales y a los mini hornos. No pierdas detalle, y no dejes de plantearnos cualquier posible duda concreta que te pueda quedar en el tintero, haciendo uso del bloque de comentarios al final.
Ventajas de las Freidoras Sin Aceite sobre los Hornos
- Tamaño: una de las principales diferencias entre hornos y freidoras de aire caliente reside en su tamaño. Y es que, aunque hay algunos hornos bastante compactos, o incluso mini hornos portátiles, las freidoras sin aceite ganan por goleada. Sus reducidas dimensiones nos permitirán colocarlas en cualquier rincón de la cocina, por lo que es un gran punto a favor si no disponemos de mucho espacio libre. El hecho de ser más pequeñas, además, hace que las freidoras sin aceite consuman menos, tarden mucho menos en precalentarse, y resulten mucho más eficientes a la hora de «hacer fritos al horno».
- Diseño: aquí, no hay debate posible… Las formas redondeadas, elegantes y casi futuristas de las freidoras sin aceite dejan a los hornos bastante desfasados (al menos, en cuanto a la apariencia estética se refiere). Por tanto, si quieres que tu electrodoméstico nuevo, además de funcional, sea también un elemento decorativo más en tu cocina, las bonitas freidoras sin aceite serán tu mejor opción. El «ni para ti ni para mi» nos lo encontraríamos, de nuevo, en los mini hornos, o en las freidoras sin aceite de 10 litros, con funciones de horno pero de carácter portátil.
Ningún robot de cocina encontrado. - Rendimiento: no queremos poner en duda el rendimiento de un buen horno de convección, ni muchísimo menos… Pero sí que hay que reconocer que, debido a su tamaño más compacto, el circuito de aire de las freidoras sin aceite resulta mucho más eficaz, consiguiendo los mismos resultados que un horno, o mejores (debido a la alta velocidad en la circulación de aire caliente), pero en mucho menos tiempo.
- Facilidad de limpieza: otro de los factores importantes que pueden decantar el veredicto en favor de las freidoras sin aceite es la sencillez con la que podremos limpiarlas después de utilizarlas. Y es que el 99% de los modelos disponibles en el mercado presentan un diseño modular, lo que quiere decir que se dividen en varias piezas independientes. Esto facilita enormemente las labores de limpieza. Además, muchas de estas piezas son aptas para el lavavajillas.
- Versatilidad: sabemos que en un horno se pueden preparar muchos tipos de recetas, pero lo cierto es que las freidoras sin aceite más modernas están consiguiendo superar a los hornos, pues, además de las consabidas funciones de freír patatas fritas (por supuesto), también destacan por incluir diferentes programas, para comidas tan variopintas como pollo, filetes, pescado, bacon, gambas, pizza y hasta panes, bizcochos, flanes…
- Calor. La mayoría de nosotros dejamos de usar el horno, o nos limitamos a usarlos sólo de noche, cuando llegan los meses de calor. Con las freidoras sin aceite, al ser mucho más pequeñas y requerir menos tiempo de cocinado, no tendremos este impedimento, o no, al menos, en la misma medida.
- Precio: según crece su presencia en los hogares de nuestro país, hemos visto cómo los precios de las freidoras sin aceite iban descendiendo vertiginosamente, hasta resultar bastante asequibles. Hoy día, no resulta nada complicado encontrar decenas de freidoras de aire caliente muy baratas, por lo que consideramos que es una ventaja importante.
Desventajas de las Freidoras Sin Aceite frente a los Hornos
- Capacidad: es el caballo de batalla de los hornos de convección en este enfrentamiento con las freidoras sin aceite. Su mayor tamaño aquí juega a su favor, pues el horno nos permitirá cocinar una mayor cantidad de alimentos de una sola vez, ya sean varias raciones para varios comensales o un alimento más voluminoso, como por ejemplo, un gran pavo para la cena de Navidad.
- Varios platos simultáneos: gracias a esa mayor capacidad de la que acabamos de hablar y a la posibilidad de color rejillas a diferentes alturas, podremos cocinar dos platos simultáneamente. Esto se traduce en menos tiempo a la hora de cocinar el total de los platos de una comida y, por otro lado, también se evita que el primer plato se enfríe mientras cocinamos el segundo. En una freidora sin aceite, lo normal es que tuviésemos que cocinar primero un plato y luego el segundo (más tiempo en total, y con posibilidad de que el primero se enfríe mientras se hace el segundo).
- Uso de moldes y bandejas: de nuevo, volvemos a referirnos al tamaño superior de los hornos para señalar que, gracias a ello, también podremos usar bandejas para cocinar y luego servir los platos, o incluso todo tipo de moldes con los que elaborar bizcochos, pasteles y tartas. Esta limitación, de nuevo, la podemos salvar con los modelos de freidoras sin aceite de 10 litros, o incluso de 12 litros.
¿Hornos o Freidoras Sin Aceite? Opiniones
Como acabamos de ver, cada uno de estos aparatos cuenta con sus propios puntos fuertes y débiles. Por lo tanto, debemos ser cada uno de nosotros los que, en función de nuestras preferencias y necesidades concretas, escojamos qué nos resulta más conveniente, comprar un horno o comprar una freidoras sin aceite. Habrá también quien no quiera renunciar a ninguna de las características de ambos electrodomésticos y decida hacerse con los dos… ¿Por qué no?
En resumidas cuentas, nuestro consejo es que, antes de adquirir uno u otro, te detengas unos instantes a valorar lo que puede ofrecer cada uno de estos aparatos y que luego decidas basándote en aquello que consideres prioritario. Y es que, tanto los hornos como las freidoras sin aceite son electrodomésticos fantásticos, y ambos pueden convertirse en grandes adquisiciones para tu cocina.
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